Simulaciones por ordenador en la ciencia

No me convencen. Es algo que llevo pensando un tiempo y que leyendo un artículo en el que nombran unas simulaciones por ordenador, me he acordado (el artículo no tiene nada que ver con lo que he contado, pero aprovecho para linkar un buen blog de ciencia).

No es que sepa exactamente cómo va el asunto de las simulaciones, pero es mi percepción y como veo este tema. Espero creer que en la investigación científica ni se anularán ni darán por buenas ninguna hipótesis simplemente atendiendo a su simulación por ordenador. En ese caso, supongo que simplemente estaré explicando el porqué; en caso contrario, quede esto como una crítica a quien se deje llevar por las simulaciones. Yo afirmo que:

No se puden utilizar simulaciones por ordenador para falsar una hipótesis sobre una nueva teoría en cualquier campo.

Y que explicaré. Un ordenador no puede simular el comportamiento real del universo, ni de la Tierra, ni siquiera de lo que acontece en un simple vaso de agua. A un ordenador le decimos cómo debe comportarse. Y esa es la clave de todo el asunto. Construimos modelos matemáticos tratando de explicar el universo, pero estos modelos representan sólo una mínima parte del mismo, sólo lo que podemos ver y entender. Por esto mismo, esos modelos no contienen la información exacta del comportamiento del universo, sino el que nosotros hemos asimilado hasta ahora.

Si observamos que existen lagunas en nuestro modelo y proponemos uno nuevo ¡cómo vamos a desestimar estas hipótesis con el modelo viejo! Por ejemplo, sería como tener una simulación comportándose conforme a las leyes de Newton y querer probar que la velocidad máxima alcanzable por un cuerpo en el vacío es C. Pues esto no ocurrirá y cualquier objeto que aceleres en una simulación basada en la física clásica podrá superar la velocidad de la luz y lo que haga falta.

Esto obviamente también ocurre en el papel y el mundo real, pero a veces se toman las simulaciones por computador como una verdad no sujeta a errores. Para ver que esto mismo ya ocurre, sólo tenemos que ir a otro ejemplo muy clásico y que me apasiona, que es el famoso experimento de Michelson y Morley. Se trataba de una ingeniosa forma de medir la velocidad de la Tierra por el éter a finales del siglo XIX. A grandes rasgos se basaba en que la Tierra perturba el éter al atraversarlo (la mecánica de fluídos ya estaba desarrollada) por lo que enviando dos rayos de luz que recorran la misma distancia en diferentes direcciones, al verse afectados por el movimiento del éter de distinta manera, no llegarán al mismo tiempo a su destino.

Este experimento fue se repitió en innumerables ocasiones y, por supuesto, los rayos siempre llegaban a la vez puesto que no hay éter que valga alrededor de la Tierra. Sin embargo, en todas las ocasiones se asumió que se estaban tomando mal los cálculos. Más tarde alguien empezó a preguntarse si podía ser que los experimentos fuesen correctos, y todo terminó con las Teorías de la Relatividad de Einstein.

Me fascina esta anécdota por lo mucho que tenemos que aprender de ella. No podemos cerrarnos mentalmente y agarrarnos a lo que ya sabemos cuando la experiencia nos dice una y otra vez lo contrario. Si esto se hubiese simulado por ordenador probando  diferentes velocidades para la Tierra, habría funcionado a la perfección.

Y pensando al respecto mientras escribo el artículo, creo que puedo enunciar una versión fuerte de mi afirmación anterior.

No es posible utilizar la simulación por ordenador para falsar ni verificar ninguna hipótesis.

Quizás nos pueda dar pistas de cómo funcionará, pero nunca de si es verdad, y volvemos al principio: un ordenador se comportará como tú le digas que se comporte.

No puedes programar unos autómatas simples, con unos campos que variarán aleatoriamente en cada generación y que representan propiedades externas de estos autómatas, ponerlos a interaccionar y luego decir: «Eh, la evolución se debe a genes que varían al azar, lo he comprobado en una simulación por odenador«. No. Tú le has dicho a tu ordenador que simule la evolución así, lo raro sería que se comportase de otro modo.

Por todo esto, creo que las simulaciones sólo se deberían utilizar para estudiar comportamientos que nos serían muy complejos analizar en el papel, es decir, predecir cómo sucederá algo que nos interese, pero no para hacer pruebas sobre ninguna hipótesis.

Esto último es lo que se hace para dar el parte del tiempo. Son tantos los factores a analizar que es casi imposible hacerlo a mano, con lo que se hace una simulación con la información que tenemos y más o menos se hace una predicción. Y es tan complicado y nos quedan tantas condiciones por comprender, que nunca se da un parte con más de tres o cuatro días de antelación, y muchas veces incluso se falla el del día siguiente. Por esto mismo es también muy absurdo cuando se afirma: «Según las simulaciones por ordenador, en el año 2100 la temperatura global será de 40º». Nadie puede predecir eso. Claro, que ahí también se juega a que no nos acordamos de lo que dicen de un mes para otro, como para comprobar nada dentro de cien años.

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