Dolor. Morirme quiero desde que el viernes me dieron la fecha para defender el PFC. Si el último día os hablaba del RELAX que supuso entregar, hoy sólo puedo hablar del dolor al saber que defiendo este viernes 21 a las 10 am.
Lo que jode no es que sea ya (que me parece genial), ni que sea temprano (que siempre me han gustado más las 11 ó las 12 del mediodía). ¡Es que es el día siguiente de la Apertura Paralela de la EUPLA!
Con lo que hemos sufrido hasta que por fin confirmaron que sí que había este año (pasó parecido a lo que en Huesca, pero el alcalde fue más duro que el de aquí). Este año que la Paralela se estrena en carpas (y que espero que no sea realmente la última, que no me extrañaría tal y como estaba el asunto) me la pierdo. Además llevaba la intención de ir ya un señor Ingeniero Técnico; pero me han arruinado mis ilusiones. No obstante, el viernes por la noche pienso montar mi propia Paralela, con casino, y con furcias. Mucho mejor que la verdadera Paralela.
Y si no posteo, no sólo es porque me paso el día pegándome cabezazos contra la pared desde que me he enterado, sino que estoy currándome una buena presentación. Esto de Beamer es la leche, cada día amó más a LATEX. Para muestra, un par de diapostivas de las que he hecho.
¡Ey!
Si es que tiene unas gracias la vida… ¡ánimo tío, que es ya el paso último de esta etapa!
Vi lo que nos mandaste del Latex, pero no he podido echarle un ojo aún. Veo que merece la pena.
¡Un saludo!
R.
PD: ¡Me he hecho con Planilandia! Está genial. El otro día me dijeron que fue D’Alambert el que primero «jugó» con una cuarta dimensión -gracias al giro algebraíco que le dió Descartes a la Geometría Euclídea; pero matemáticamente (algebra), ya que «físicamente» -natura-, no era concebible.
Malditas las gracias de la vida. Gracias por los ánimos, ver si cerramos etapa.
A ver si no os da miedo el LaTeX, que escribir un poco más no es sólo para informáticos.
Por los fragmentos que citaba Rudy Rucker de Planilandia ya dije que tenía muy buena pinta, a ver cuándo puedo leerlo yo. No sabía que D’Alambert hubiera sido el primero en meterle mano.
A ver si se te ve el pelo estas navidades ¡que te guardo una cosa desde finales de verano!
Un saludo.