Mandatarios incultos y crédulos

Maldita sea. Había oído hablar de la timopulsera ésa con un holograma (Power Balance, la llaman) y pensé que sería una moda pasajera más de timos para sentirse mejor. Desde que tengo memoria han existido ese tipo de estafas adoptando diferentes formas y estilos, y seguirán existiendo mientras continúe habiendo crédulos por el mundo, al igual que las religiones (aunque sean un tipo de engaño mejor visto socialmente y con mayor calado cultural).

Siempre había ignorado este tipo de inventos, observando con una mezcla de pena y desprecio a quienes compraban estas tonterías. Creo que demuestra mucha más ignorancia e incultura caer en uno de estos que en el timo de la estampita o en la carta nigeriana, que a fin de cuentas son más consecuencia de credulidad y egoismo, características inherentes de una persona y que no pueden ser elminadas con la facilidad de la ignorancia. La incultura de la que hace constante demostración nuestra clase política, y de la que incluso se enorgullecen muchas personas de la calle se cura leyendo y estudiando. Desprenderse de la candidez y credulidad es mucho más complicado puesto que es más bien un rasgo de nuestra personalidad.

Bueno, pues lo que me parece completamente lamentable y lo que me ha llevado a escribir esta entrada, es descubrir que no sólo deportistas y gente de la calle compra y lleva estas pulseras, sino que Elena de Borbón, infanta de España, Leire Pajín, secretaria de organización del PSOE y Gustavo de Arístegui, diputado del PP también las han llevado en público. Y, oiga, ya es duro saber que nos gobierna una panda de ignorantes, pero me agradaría que por lo menos no fuesen demostrando y aireando públicamente su estulticia.

Schrödinger’s Ender

Me hubiera gustado que mi siguiente entrada hablase sobre mi reciente viaje a Viena y Budapest donde me lo he pasado en grande, pero no he podido conseguir las fotografías hasta hace nada, y seleccionar cuáles subir y qué contar va a llevarme más de lo que esperaba, así que para ir abriendo boca pondré este gif.

Entramos en una universidad vienesa cuyo patio interior además de estar lleno de estudiantes aprovechando unos miserables rayos de sol, tenía ingentes cantidades de bustos de científicos famosos a los que yo no conocía en absoluto (pero cuyos nombres sonaban a cosas de medicina y química) hasta que nos encontramos con el busto del amigo Erwin Schrödinger, con el que no pude evitar hacerme estas dos fotografías.

Ender está vivo y muerto hasta que visitas Tienda de Ultramarinos

Si no lo entiendes deberías leer sobre un clásico de las paradojas de la física, fruto de aquellos maravillosos años de discusiones sobre la matería a principio de siglo. La que me hice con Christian Dopler tendrá que esperar a que le dedique un rato al photoshop o engañe a alguien que se maneje.

Un poco de todo

Como ya dije en el anterior post, llevo un final de mes liado de cojones, de modo que apenas leo blogs, y mucho menos puedo escribir aquí algo decente. Pero siempre hay alguien que te manda un enlace, o te da tiempo a leer algo interesante durante el café matutino. Allá van unos enlaces a cosas que me han gustado estos días:

La dieta mínima. (no lo leí en su día, pero lo ha enlazado en Good calories, Bad calories, que también merece la pe. na)Pons Asinorum se preguntó hace mucho tiempo, con único fin recreativo y no con intención de seguirla, cuál sería el menor número de alimentos que necesita un ser humano para obtener las necesidades básicas que requiere su organismo. Lástima que probablemente no tenga en cuenta, como advierten en los comentarios, que «No basta con tener en cuenta la “composición de los alimentos”, sino en conocer el grado de metabolización que tu cuerpo puede hacer de ellos».

Así se limpia el espejo de un telescopio gigante. Resulta casi extravagante que haya que bajar un espejo de 8 metros de diámetro y 22 toneladas desde el pico a 2600 metros de altura en el que está, hasta unos laboratorios en el desierto para limpiar concienzudamente cada milímetro cuadrado del invento. Como se les rompa de camino les iba a llevar 777 años de mala suerte.

Día Europeo de la Homeopatía. He descubierto escandalizado que en la UE se ha comenzado a celebrar un día dedicado a la homeopatía, esa mentira. Quiero señalar que  la «Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios autoriza la comercialización del medicamento homeopático no le reconoce indicación terapéutica alguna, puesto que no la acredita de acuerdo con los estándares científicos que exige la AEMPS para demostrar la eficacia terapéutica». Es decir, como quien vende croquetas. La AEMPS autoriza que se vendan porque no hacen ningún daño, pero no como medicamentos.

«La Ley Sinde nunca llegará al Boletín Oficial del Estado»: entrevista a Carlos Sánchez Almeida, abogado. Reflexiones de este abogado sobre la ley que tanto ha dado que hablar. Quizás me quede con «A la vista de las cifras que se están manejando en los sistemas de descarga online que ofrecen las consolas de Sony y Microsoft, el iPhone de Apple o el Kindle de Amazon, creo poder afirmar con bastante seguridad que el concepto de “todo gratis” es un falso mito, creado de forma interesada por los responsables de una industria que no ha sabido adaptarse al mundo online. Si se ofrece al público una oferta de calidad, con descarga instantánea y a un precio razonable, el margen de los canales alternativos de descarga se reducirá a cifras despreciables». Por supuesto, los modelos que nombra no son españoles, pues ya sabéis que aquí cualquier intento de adaptarse al mundo digital es algo implanteable.

Cuando la CEE quiso eliminar la Ñ de los teclados. Como siempre, el dinero y el capitalismo como motor incesante la rueda que no duda en aplastar cualquier diferencia cultural a cambio de una mejora económica. (lo publicado en la wikipedia a día de hoy está extraído de este blog). Me gusta la respuesta de Gabriel García Márquez cuando dijo que «Los autores de semejante abuso y de tamaña arrogancia deberían saber que la eñe no es una antigualla arqueológica, sino todo lo contrario: un salto cultural de una lengua romance que dejó atrás a las otras al expresar con una sola letra un sonido que en otras lenguas sigue expresándose con dos».

Erasmus a Cork (Irlanda)

Qué mejor día que hoy, San Patricio, para escribir esto.

La semana pasada se adjudicaron las plazas del CPS para el Erasmus del curso 2010/11. Finalmente me ha tocado Cork, al sur de Irlanda. Creo que habría preferido Gran Bretaña, pero sólo había un par de plazas y se las quedó gente con mejores notas que yo. De todas formas estoy bastante contento porque quería un país en el que se hablase inglés de forma habitual y no cuando comienzas tú la conversación en inglés.

Cork es la segunda ciudad más importante de irlanda con casi 200 000 habitantes, la cuarta parte de los cuales son estudiantes. Por lo que cuenta la Wikipedia, si ya de por sí los Irlandeses tienen un acento distinto respecto al resto de ingleses, en Cork tienen un acento distinto al resto de Irlanda. Mucho más cerrado y con su propio «argot». Como cuando los de Huesca os decimos tajador, pozal, reglote, barzas o «de propio«. De hecho, afirman que incluso hay un acento distinto en cada margen del río que atraviesa la ciudad.

Irlanda era un país sumido en la miseria hasta que en los 90 y los 2000 despegó económicamente a la par que innumerables multinacionales (especialmente tecnológicas) establecieron sedes en el país, con lo que poco antes de la crisis llegó a tener uno de los mayores PIB per cápita del mundo. Sin embargo, las crisis devuelven a cada país a donde le corresponde y ahora los tenemos como compañeros con Grecia en la lista de los países más afectados y con menos perspectivas de superar la crisis a la par que nuestros vecinos europeos.

A todo esto, Cork es una ciudad costera del sur de Irlanda, lo que le sitúa en una posición privilegiada como puerto comercial, por lo que industrialmente es una ciudad muy importante. Ahí está la sede europea de Apple y de Heineken. Además, tiene sedes de Motorola, Amazon y EMC. Está claro que trabajo de informático no puede faltar.

Hoy tendré que echarme una Guinness (o más teniendo en cuenta el día que es) para ir acostumbrándome a las stout, que muy rara vez pido cerveza negra y creo que ahí será el menú del día. A ver si vuelvo a casa con uno de esos gorros que suelen regalar días como hoy.

Si ya llevo pocas entradas este mes, en lo que queda dudo que pueda escribir mucho más. No sólo este cuatrimestre llevo prácticas más complicadas que otras veces, sino que tengo que entregarlas de forma más constante y con menos tiempo entre una y otra que en otras ocasiones. Para terminar, a final de este mes tenemos que hacer la entrega del proyecto en el que estoy metido en mi trabajo, con lo que los últimos días siempre hay que dedicarle más horas y hay más estrés.

Zombies

Hace un par de días me pasaron un corto buenísimo de Guillermo Benet que se presenta este año al notodofilmfest y que quiero compartir con vosotros. Se llama Desayuno Zombie.

Hace media hora me han pasado otro corto también sobre zombies, que me ha gustado incluso más. Es otro estilo completamente distinto y me ha encantado. Es de un tal José Carrillo (Lone Bannana Productiones) y el corto se llama What to do in a zombie attack (Qué hacer en un ataque zombie). Que los disfruteis.

La carretera

Hace un par de semanas terminé de leer La Carretera, de Cormac McCarthy. Es un libro que alguien (no recuerdo quién) me recomendó hace varios años, pero todo lo que me avanzó sobre el argumento fue que trataba de un padre y un hijo caminando por una carretera. Nada más. Sonaba aburrido así que jamás me apeteció leerlo, hasta que recientemente vi el trailer de la película con Viggo Mortensen y me llamó mucho la atención. Estaba yo pensando en ello cuando un amigo, esa misma semana, me dijo: «Fíjate, casualidades de la vida, que justo me he terminado un libro esta tarde, he encendido la tele ¡y anunciaban una película basada en ese libro!«. Casualidades de la vida, pensé yo. Y le dije «¿La Carretera, no? Casualidades de la vida, yo también estaba pensando en ese libro«. Así que tras su recomendación no dudé en leerlo cuanto antes, para animarme a ver la película si me gustaba el libro.

La Carretera narra un relato desgarrador. Transcurre en un mundo desolado, no sé sabe cuánto tiempo atrás ni como, una Tierra reducida a cenizas con la inmensa mayoría de la población muerta. En comparación, Mad Max sería un paraíso despoblado y Waterworld el mundo colorido e iluminado totalmente contrario.

Empieza a medias, con un padre despertándose en mitad de la fría noche y comprobando que su hijo todavía sigue a su lado, vivo, respirando. El lector no tiene la certeza de qué está ocurriendo ni por qué, pero en seguida se ve atrapado por la continua lucha por la supervivencia a la que padre e hijo se ven sometidos en un mundo tan hostil.

No sólo todo está quemado y cualquier atisbo de civilización destruído, es que hace años de eso y no parece que las cosas vayan a mejorar. El mundo está cubierto constantemente por una capa de nubes y polvo que sólo permite adivinar la posición del Sol durante el día, y que provoca las noches más oscuras que haya conocido la Humanidad.

Y si resultase difícil sobrevivir en un entorno así, las pocas personas supervivientes han tenido que deshumanizarse y sacar sus instintos más básicos y feroces en la lucha por la supervivencia. Es un retrato del hombre en su estado más indefenso y salvaje que me ha recordado mucho al Ensayo sobre la Ceguera de José Saramago. En ambos relatos he encontrado el mismo tipo de escenas brutales, no aptas para las mentes más sensibles, que permiten reflexionar sobre lo frágil que es la mentira de la sociedad en la que vivimos, y hasta dónde puede llegar el ser humano para sobrevivir, cuánto puede dejar de ser humano.

El padre, junto al hijo —puede intuirse que tendrá en torno a los diez años, pero tampoco se sabe— están emprendiendo un peregrinaje hacia el sur, hacia la costa, para encontrar climas más suaves y cálidos, pues cada invierno es más crudo que el anterior. También buscan el mar, que históricamente tantos recursos ha otorgado al hombre, esperando que todavía quede algún atisbo de vida y pueda seguir siendo utilizado como fuente de alimentos. Lo hacen caminando a través de carreteras, último vestigio de un mundo perdido del que hasta los recuerdos empiezan a borrarse.

No quiero adelantar nada más de la historia. Es un libro corto, que se lee rápido porque no puedes dejar de seguir el ajetreado viaje del padre y el hijo. Un padre y un hijo anónimos, por una carretera que podría estar en cualquier país actual. Está escrito con un lenguaje premeditadamente frío y parco. Incluso las conversaciones son casi vacías y escasas. Querrían hablarse, pero no hay mucho que contar sobre el infierno en el que viven. El final no me convenció mucho, y al momento de terminar el libro tampoco me pareció algo increible; pero cada día que ha pasado desde entonces me ha cautivado más. Si entonces lo dejé como una simple buena lectura, hoy lo recomendaría.

La película no terminó de convencerme. Pese a ser mucho más fiel al libro que la mayoría de adaptaciones cinematográficas que podemos ver, le faltaba algo. Los actores lo hacían bien, y la escenografía estaba lograda, pero no transmite todos los detalles que transmitía el libro. Pese a ser breve y en un ambiente más o menos definido, es una historia difícil de llevar a la gran pantalla.

La angustia, la soledad, la desesperación y la lucha por la supervivencia que lees en cada página del libro no terminé de verlos bien plasmados en el cine. El padre constantemente palpando el pecho de su hijo para comprobar si sigue vivo cuando despierta en mitad de la noche; la preocupación obsesiva por cubrirse con plásticos y no mojarse (en un ambiente tan frío supondría una muerte segura); noches y noches durmiendo al raso, apretados para guardar el calor… pequeños detalles, en suma, que provocan que el lector comprenda mejor la situación de los personajes, y la viva como suya, pero que no se consiguen transmitirlos al espectador.

Caradura e ignorante

Ya sé que este vídeo tiene una o dos semanas, pero en su día no soporté más de dos o tres minutos del mismo y acabo de verlo completo. Esta versión que cuelgo, vista en El blog de Maceira, es muy llevadera porque está plagada de cartelitos graciosos que ayudan a tragar las barbaridades que suelta este señor. La verdad es que el número de bocadillos es excesivo, y por norma suelo detestar que aparezcan, pero en este vídeo ayudan bastante.

No sé si César Alierta simplemente iba borracho y no sabía lo que decía, pero me parece alucinante que el Presidente Ejecutivo de Telefónica demuestre tanta ignorancia sobre internet (que probablemente sea lo más importante que vende su compañía). Y no digo sólo del absurdo que plantea de cobrar a buscadores porque los usuarios de su red los utilicen, es que cuando intenta explicar el «claud compuitin» y otras cosas no dice más que tonterías sin ningún sentido: no sabe de lo que está hablando.

Y de verdad, me llama la atención que el presidente de Telefónica pueda ser tan ignorante en este tema. O eso, o es sólo un caradura más que se quiere subir al carro, tan de moda ahora, de cobrar por no hacer nada.

EL PAÍS: La izquierda de pacotilla

Me encanta la supuesta izquierda de mentira que nos toca sufrir en este país. Son la hostia. Sin entrar a opinar ahora sobre lo acontecido anoche en la Gala de Eurovisión con John Cobra (quizás en otro post porque he estado siguiendo el caso desde que Forocoches empezó a votarle) quiero comentar un artículo publicado hoy en EL PAÍS. El título es «Actuación vergonzosa» de John Cobra en la gala de finalistas para Eurovisión y lo firma Carmen Pérez-Lanzac.

En el artículo se especifica en dos ocasiones que John Cobra ha pasado por prisión, ¡en un artículo musical! Las frases exactas son una en el subtítulo «El rapero y ex presidiario se enfrenta con gestos obscenos al público de TVE» y otra al comienzo del artículo «John Cobra, el rapero y ex presidiario que llegó a Eurovisión aupado por la web forocoches, no representará a la cadena pública en el festival.»

Realmente, en la crónica de una gala musical no creo que aporte mucho este dato, y veo muy claro que está escrito de forma despectiva, para desprestigiar al personaje. Lo que me parece más indignante del asunto es que luego a todos estos socialistas de postín se les llenará la boca diciendo que la cárcel no es un castigo sino una forma de reeducar y reformar a los delincuentes y que hay que abogar por la reintegración de éstos y otros desfavorecidos en la sociedad, y luego son los primeros en utilizar el hecho de que sea ex-presidiario como lo peor que hizo John Cobra anoche.

Leer declaraciones similares en Telecinco (después de que echaran a Karmele empezaron a criticar el concurso, y el artículo de hoy despreciando Eurovisión no tiene pérdida), que son expertos en entrevistar a presidiarios y delincuentes ya es bochornoso, y más que intenten dar lecciones de moral; pero de esa cadena me espero cualquier cosa porque venderían a su madre en directo por el morbo.